Faltan metros de Huerta reivindica la memoria territorial de l'Horta de La Torre, así como, el proceso de su transformación paisajística. La obra del 2019 se sitúa en el plan urbanístico de Sociópolis, un modelo de ciudad genérica con grandes edificios modulares y autorreferidos que rompen el paisaje y que ha supuesto la sustitución de los modelos rurales por los urbanos, mediante la imposición y sin dejar negociar a una de las partes los términos de la ocupación del territorio. Además, se puede ver la superposición cultural de los saberes universales sobre los saberes tradicionales que en este caso se ejemplifica con la sustitución de la huerta histórica por el modelo de huertos urbanos.
El suelo sobre el cual se erige se corresponde a 350.000 m² de lo que anteriormente fue una huerta protegida y que se destruyó. Para tratar de instaurar un modelo transicional entre la ciudad y la Huerta se realizaron 3.311 m² de huertos urbanos, gestionados por la administración pública, cerrados y con limitaciones horarias. Su uso está totalmente regulado y no se puede acceder a ellos sin pasar por varios requisitos del sistema, como por ejemplo, estar empadronado en la ciudad aunque se ubica justo en el límite entre València y los pueblos de l'Horta, negando el acceso a aquellos que no sean de la capital.
Pese a la voluntad de convivencia Sociòpolis se presenta como un proyecto absurdo. La ciudad de València, por su naturaleza histórica, siempre ha disfrutado de espacios transicionales Huerta/ciudad y La Torre ya era un ejemplo de esto. Se trata de una ciudad fantasma, convertida toda ella en un espacio baldío, donde las construcciones medio vacías chocan diametralmente con el modelo arquitectónico de la zona. Entre ellas se encuentran grandes solares, de los cuales se ha apoderado la naturaleza residual, vallados para impedir cualquier uso alternativo sobre ellos.
El trabajo consiste en una serie de intervenciones pintadas mediante plantillas ubicadas en cada uno de los edificios realizados en el espacio del proyecto urbanístico.
En las pintadas se lee, por un lado, en negro Falten 346.689 m² d'Horta, referencia a la cantidad de metros de huerta destruidos restando los huertos urbanos. Por la otra vemos un plano de las parcelas hortícolas que habían antes de la actual urbanización, ejecutado con un color amarillo fluorescente asociado a métodos de marcación del suelo en el sector de la construcción.